Y se llamará... MANOLO
En mi familia no son de contar historias. Es una pena, seguro que tienen miles. Y lo peor, como han pasado olímpicamente de las historias, son incapaces de recordarlas y con ellas se han ido la memoria de abuelos, bisabuelos, guerras, postguerras, tradiciones, saber hacer, secretos, pócimas y recetas.
A mi me gusta contar historias. Soy cuentista, aunque me salga sólo a temporadas.
Guardo siempre las pocas historias que me han contado como oro en paño. Como vehículo de comunicación con los que me precedieron. Historias del abuelo Manolo, de la guerra, del abuelo José Mari subiendo con el macho por la cuesta de la plana, de mi padre corriendo rallies en los años 70, de mi madre bailando en las palmeras y llegando tarde a casa, de mi abuela esperando la última hora charrando en la puerta de su casa, de los hongos del Caúcaso de la María, de la fantasía recorriendo mi cabeza en el almacén de la Severina, de las tardes-noches de bar en el Equus...
Creo que me contaron que a mi abuelo Manolo le pusieron ese nombre por el hermano de uno de mis bisabuelos. Gregorio, el de Alcañiz, tuvo un hermano que se llamaba Manuel, y así llamó a su hijo. Manuel, mi tío-bisabuelo, murió en la Guerra de África, en los años 20, y allí se quedó, con sus recuerdos y sus esperanzas.
A mi padre le llamaron Manuel. Y a mí, por estas cosas de padres y madres, me lo pusieron de soslayo, convirtiendo al Manuel en Víctor Manuel, que queda muy chulo porque es nombre de rey italiano, pero no es lo mismo.
Hoy ecografía. Todo Bien. Mamisusi más guapa que nunca.
.
Y se llamará............... MANUEL.
1 comentario
Marisa -
Así que ¡es chico...! Enhorabuena