Temblar el pulso

Artículo de El Mestizo en el periódico La Comarca:

 

 

 

Una señora indignada (aunque creo que no por el 15M) me asalta en la fila del supermercado mientras recojo la compra e intento calmar a Manuel que se me acaba de revolucionar por las gasas bajas. La señora en cuestión está indignada por no sé qué comentario de una “ama de casa venida a alcaldesa” que dije hace unas semanas. Tampoco tengo ganas de dar explicaciones a la buena mujer pues cuando llegue a casa tengo que pasar la mopa, recoger la cocina y hacer la comida al pequeño, la merienda a los mayores y preparar la cena porque hoy tenemos invitados y no estamos para consumir en los restaurantes. Además llevo desde las siete levantado y quizás no pueda sacar tiempo para escribir un par de trabajos que tengo pendientes y hacer cuentas para llegar a fin de mes. Ya saben, las del mismo gremio acabamos siempre despotricando las unas de las otras.

 

Ya me dice mi madre que piense dos veces lo que digo y escribo, aunque si lo piensas mucho se pierde naturalidad, expontaneidad, gracia e ironía. Y quizás acabas diciendo y maquillando tanto lo que ibas a exponer que vale más o dejarlo como está… o no escribirlo.

 

A los que no les tiembla el pulso es a los responsables socio-políticos de corto y largo alcance de este país. Ellos viven en su mundo (¡qué ilusión!) y no esperan grandes movimientos ni críticas. Que se la suda vamos.

 

Así ha ocurrido en administraciones locales y algo cutres como la Comarca del Bajo Aragón, que ha estado gobernada por el PP, luego el PAR y los del PSOE colocando a mediocres políticos para que chuparan de la borrega. En este caso la bisagra son los del capullo, y como buenos cucullus no llegados a rosa tragan con carros y carretas con lo que les cuentan desde Teruel o Zaragoza, vengan de la cueva, de las gestoras o vete tú a saber de dónde.

 

Así pues, poco puede importar lo que yo aquí diga o deje de decir. O lo que me pueda temblar el pulso. Como no les tembló el pulso al Sr. Ponz y al Sr. Figuerola cuando decidieron cargarse el programa de la Agencia de Desarrollo de la Comarca del Bajo Aragón aún sabiendo que lo tenían subvencionado (y bien). Luego se echaban la mierda los unos a los otros. Lo del uno, que vive y bien de hacer y decidir poco, tiene su miga. Lo de otros, que cobran cuatro perras al mes es pa echarse a temblar y dice mucho de los clase política de este país y sus jerarquías de tres al cuarto. Eso sí, no les tembló el pulso ningún año por aprobar con sus coleguillas más de 50 millones de las antiguas pesetas al año para gastos de presidente, vicepresidente, dietas y prebendas a los consejerillos. Aquí todos tragaban. Les recomiendo que visiten el despacho de presidencia de esta nuestra comarca. Digno de un programa del Follonero.

Es lo que hay, me decía un socialisto y un parista que “se decían” amigos míos.

 

Pues ahí lo tienen. Es lo que hay. ¿Y el de los ojos tristes y caminos angostos? Del otro fichaje hablaremos otro día… que me caliento y tengo que tender antes de que vengan los zagales del cole.