Bergosa y el silencio
Este fin de semana estuvimos en casa de Fernando disfrutando de la montaña.
El domingo optamos por el agua, el sudor y el silencio. Cerca de todo y lejos de nada, afrontando las rampas, el barro y la naturaleza pensé encontrar los viejos fantasmas como si de un poeta se tratase.
No los pude ver por ninguna parte. Quizás se fueron hastiados de inocencia. O quizás, como cualquier mortal que viste montañas con cachirulos estaban, sencillamente, esquiando en Candanchú.
.........
0 comentarios